VIAJE DE MARÍA (POEMA)
María viaja sin grima
A lomos de borriquita,
A la aldea de su prima
Para rendirle visita.
Anochece, y las estrellas
En el cielo ya aparecen;
Las más fúlgidas y bellas
Ante María se oscurecen.
Un lucero que ilumina
El sendero sinuoso,
Pregunta con cierta inquina
De su belleza celoso.
¿Donde vas joven María
Tan segura y diligente?
A visitar a mi prima,
Porque soy adolescente.
Por que se me ha revelado
En palabra del Señor
Que a su esposo ha visitado
El ángel consolador.
Como he creído su anuncio,
A la palabra obediente,
Viajo hacia su morada,
Confiando en Dios clemente.
Antes que esté parturienta,
Sobre mi maternidad
Comprobaré en mi parienta
Que el ángel habló verdad.
Pues anda con Dios, María,
Primorosa flor de olor,
Y tráenos con alegría
Al eterno redentorNO DEFINIR
No limites, pedante, no definas
La fuente del magnífico universo
Origen misterioso de mi verso,
Ni ultrajes al Creador con las doctrinas
Del vil infierno donde estás inmerso
No es dios el que predique algún bigardo
Osado, que piedad y fe deforma
Y altivo dice conocer la forma
En que Dios ejecuta tan gallardo
Su obra, la moldea y la conforma.
Es Dios tan colosal e indefinible,
Que todo esfuerzo humano es arrogante
Cuando acota atrevido y querellante
La causa misteriosa, inaprensible,
Que escapa a su juicio delirante.
Acierta mucho más quien es humilde
Y deja a la creación y a su concierto
Hablar con su lenguaje claro y cierto
Que acierta hasta en la coma y en la tilde
Y así enaltece a Dios sano y liberto.
Penetra y profundiza en lo posible
Las fuentes y las causas del misterio
Con medios y talante agudo y serio
Entiende su grandeza, y apacible,
Cede la gloria a Dios con buen criterio.
Y así con todo gozo y confianza
Sin tratar de encerrar en un bolsillo
Al Dios omnipotente, muy sencillo,
Admira el universo en su alabanza
Y no te comas más el cocodrilo.
VUELVA A MÍ EL CRISTODesde el día que te fuiste de mi lado
Transito por desierto seco y muerto;
Me encuentro solitario, triste y yerto
Penando mis errores y pecado.
Perverso fui con loco desenfado,
Soberbio, habiendo loco despreciado
Tu amor que me llamaba a ser liberto
Del grillo del dolor y del pecado.
¿Y tú, que a todos das amor y vida
Me dejas en la noche oscura y fría,
Sin lumbre, sin amor, ni luz, ni guía?
Acude a mí, y sana tú mi herida
Redime por tu amor mi vida impía
Y llena el corazón de tu alegría.
Y así en tu cercanía
Disfrute en tu regazo, rozagante,
De vida, paz y gozo en todo instante.
Tu eres mi amado y guia.
ADMONICIÓN Y PROMESA DE CRISTOQuiero que tú me digas con pelos y señales
Que sientes en tu vida cuando aplasta el dolor;
Como luchas sin armas con tan furioso ardor
Que el pecado produce con heridas fatales.
Quiero decirte, amigo, que te apocas en balde
Con una lucha sorda y un resultado vano;
Con un esfuerzo inútil, con un dolor insano,
Sin poder ni esperanza que te asegure y guarde.
Solo en mí busca el Cielo y el nevado jazmín,
El olor de la rosa y el ungüento de flor
De mis manos piadosas que te colman de amor
Y sin precio y sin dudas te aseguran buen fin.
En mi pecho descansa tus temores y penas,
Con la paz de una vida sosegada y segura,
Las delicias gozando de mi caricia pura
Y palabras eternas, henchidas y serenas.
Si me rindes tu vida sin dudar un momento,
En total confianza de mi amor infinito,
Gustarás las delicias del consuelo bendito
Que mi Padre amoroso te dispense sin cuento.
ACERCARME
Con profundo temor me así a tu guía
No siendo sino un sucio y ruin humano
Cuando yendo a tu lado, del pantano
Del mal, tú me sacabas en franquía.
Y fui con esperanza y alegría;
No solo por temor tomé tu mano
Y así gané mi santo y buen hermano
El premio por tu gracia y mi osadía.
Tiempos fueron de angustia y de contienda;
Tozudo, despreciaba tu salud
Y al fin la he conseguido por mi enmienda.
Y ahora que anhelo transitar tu senda
No puedo ya ofrendarte juventud,
Sino solo una floja y parca enmienda.
Sin ceño o reprimenda
Aceptas santo Cristo mis despojos
Que limpias por tu amor ante tus ojos.
SE ACABA MI SENDASe acorta mi camino, se me acaba y estrecha,
Mis baladas de amores se me hicieron endecha,
La color de la cara se me ha vuelto ya oscura
Y mi claro horizonte se me ha vuelto negrura.
No quiero que por miedo o pesar prematuro
Se enturbie lo que resta de mi vida, al conjuro
De brumosos presagios, ni que bocas paganas
Sin fe y sin esperanza me auguren cosas vanas.
No tengo queja alguna porque siempre he vivido
El amor y las penas, el canto y el gemido,
Con ánimo resuelto y confianza plena
En el Dios que me guarda y en su luz que me llena.
Nunca me faltó nada, que todo lo he tenido,
Porque dentro de mí he gozado y creído
La belleza del Cielo, la grandeza de Cristo
Que sin tasa o reproche de todo me ha provisto.
De paz y de esperanza he sido pregonero,
Aunque no haya gozado de lauros o dinero,
Pero siempre he tenido el placer de haber hecho
Lo que siempre he debido sin aceptar cohecho.
He sido siempre rico en amor y en amigos
Y tampoco faltaron ni siquiera enemigos
Que dieran a mis voces, con su acerba censura,
El respaldo excusado a la verdad que es pura.
De la mentira huyendo busqué en el evangelio
Sin haber encontrado ningún principio serio
Y al subir por el monte de la verdad sencilla
Me di cuenta muy clara, que somos solo arcilla.
Y al despedirme anciano del mundo que abandono,
Le doy gracias al cielo, sin odio y sin encono,
Por que he vivido alegre y pleno de esperanza
Y voy a mi destino con alma gaya y mansa.
ESCONDISTE
Te admiro Dios porque escondiste
Tus cosas a los sabios y letrados,
Las diste a conocer a tus amados
Y en boca de tu hijo las pusiste.
Revelas tus misterios y grandeza,
Al manso que de ti acude a beber,
El néctar de la fuente del saber
Y fía humildemente en tu promesa.
Porque si hay sujeción y acatamiento,
Allí también habrá sabiduría,
Y aquel que entregado en ti confía
Hallará de tu paz contentamiento.
El que en ciencia mundanal loco porfía,
Es ciego en las pericias del amor,
Espíritu rebelde y detractor
De orgullo, necedad y apostasía.
Alójate en mi casa como dueño
Que yo te cederé la buena estancia,
Y aun pobre, estimaré como ganancia,
Que quieras amparar mi paz y sueño.
Alegre beba el agua de tu fuente,
Que sé que si me abajo ante tu gloria,
Pondrás siempre a Jesús en mi memoria
Y habitarás en mí perpetuamente.
BASTA DE MONSERGAS
Basta de monsergas y de religiones;
De rondar iglesias y de la jactancia
De ensartar versitos con invocaciones
Y bajar los ojos con falsa alabanza.
Jesús no recibe huecas oraciones,
Ni locas visiones, ni floja mudanza;
Que en el padrenuestro, sin vacilaciones,
De oración al Padre, nos dejó enseñanza.
No somos bigardos que de todo entienden,
Aplastando a todos con sus redundancias,
Que ser admiradas de todos pretenden.
Que ser el amigo del Cristo eminente,
Tan solo requiere humildad, y ansias
De pertenecerle fervorosamente.
Ya el Jesús doliente
En victoria eterna todo ha transformado
Y es la mayor gloria vivir a su lado.
NO COMPARTO
Yo no comparto mi sentir con nadie
Y con nadie comparto su ceguera
Ni mi fe es tan solo una quimera;
Que es firme como son el sol y el aire.
Comparto amor y gozo, y el donaire
De hermanos en la fe que su bandera
Al viento mecen como alta palmera
Y no ocultan cubriéndose al socaire.
Yo busco en oración y en sentimiento
Una vida real, no una apariencia
Que el mundo ofrece en fétido alimento.
Con sabio y confiado atrevimiento
A ti, Señor que sondas mi conciencia
Me allego sin derecho ni argumento.
Pues eres el cimiento
De toda obra, esfuerzo y comunión
Y solo en ti mora la salvación.
CONSÉRVATEConsérvate tan limpio que sin tara
Imites de la abeja su recato
Que siempre que a beber llega a un regato
No bebe más que el agua limpia y clara
Si quieres obtener sabiduría
No quieras obtenerla con violencia,
Más pide a Dios su gracia y su clemencia
Y estudia sin sandez y altanería.
No creas que ya eres rico si conoces
Que existen abundantes las riquezas,
Si no te pertenecen; son flaquezas
Que te hacen padecer si no son tuyas.
Hay cosas misteriosas que no sabes
Que son de Dios misterio muy profundo.
No trates de buscar como errabundo
Y trata de entender los más suaves.
No es piadoso el falaz conocimiento
Que el mundo te ofrece tan facundo
Solo Dios desentraña lo profundo
Y da placer, amor, vida y contento.
Si guardas persistente la justicia
Sabio y limpio te harás sin más quebranto
Y Dios ciencia dará con sumo encanto
E irá su obra haciendo sin malicia.
No hagas como el necio e ignorante,
Queriendo los misterios conocer
Que no te corresponde a ti saber,
Y déjale al Señor que te levante.
Del poeta Granadino Rafael Marañon 2004
www.misticos.net
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